Diógenes y las
lentejas
Diógenes de Sinope “El Cínico”, fue un filosofo griego del siglo IV a.C.,
caracterizado por su estilo de vida muy desprendida, ya que vivía en la calle y
solo portaba sus atuendos y una manta.
De las muchas historias, hay una en especial que muestra el autorespeto
por el mismo y la poca necesidad de aceptación:
“Un día, estaba
Diógenes comiendo un plato de lentejas sentado en el umbral de una casa cualquiera.
No había nada en
toda Atenas más barato en comida que el guiso de lentejas.
Dicho de otra
manera, comer guiso de lentejas era definirse en estado de la mayor
precariedad.
Pasó un ministro
del emperador y le dijo:
—¡Ay! Diógenes,
si aprendieras a ser más sumiso y a adular un poco al emperador, no tendrías
que comer tantas lentejas.
Diógenes dejó de
comer, levantó la vista y mirando al acaudalado interlocutor profundamente, le
dijo:.—Ay de ti, hermano. Si aprendieras a comer un poco de lentejas, no
tendrías que ser sumiso y adular tanto al emperador.”
Opinión: Podemos apreciar que Diógenes esta conforme a su estilo de vida, sin
tener que vivir bajo la sombra de alguien demostrando algo que no es él. En nuestra vida no debemos permitir que otros quieran pisotearnos o dominarnos por algo a cambio, debemos ser feliz con nosotros mismos, respetarnos y encontrar lo que en realidad nos trae felicidad.
Comentarios
Publicar un comentario